Las rocas de Gorrondatxe ,clavo de oro mundial

Las rocas de Gorrondatxe "son de hace unos 48 millones de años. Sabemos que se han formado bajo del mar, seguro. Y además, estudiando los microfósiles sabemos, no solo que la playa de Gorrondatxe estaba bajo el mar, sino que como mínimo el mar tenía 1.000 metros de profundidad o 1.500 metros probablemente. Y que la temperatura en este sitio era más elevada que en la actualidad". Xabier Orue-Etxebarria es doctor del departamento de Estratigrafía y Paleontología de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la UPV y es parte del equipo que ha estado estudiando los estratos de los acantilados de Azkorri. Gracias a ese trabajo ha llegado el reconocimiento de la Unión Internacional de Ciencias Geológicas, que ha designado esta zona como referente mundial científico del periodo Luteciense. "Conseguir un estratotipo como este es algo muy difícil. Si un investigador quiere saber qué pasó en la historia de la Tierra hace 48 millones de años, lo lógico sería que viniera a esta playa a estudiar. Lo más normal es que de aquí en adelante empiecen a venir investigadores extranjeros más que del Estado, a estudiar aquí para poder comparar con lo que ellos conocen en otros sitios. A partir de ahora el nombre de Gorrondatxe y el de Getxo van a quedar para siempre en los libros de geología", celebra Orue-Etxebarria. El mejor sitio del mundo para los expertos que quieran estudiar el periodo geológico del Luteciense se encuentra en Getxo (Vizcaya) Así lo ha proclamado de manera oficial la Unión Internacional de Ciencias Geológicas -IUGS en inglés-. Esta playa de roca algorteña se ha hecho merecedora del 'clavo de oro'. Con ese símbolo tan peculiar se distinguen aquellos lugares de especial singularidad y propiedades, dentro del mundo de la estratigrafía. Las rocas de Gorrondatxe, que afloraron en los acantilados de la playa se depositaron en un medio marino profundo hace 47,8 millones de años. Y en 2012 pasarán a considerarse como la mejor sección para el estudio de los materiales de ese tiempo, con lo que el trabajo que lleva realizando la Universidad del País Vasco (UPV) en esta zona durante más de una década se verá reconocido.